La historia del Boeing 787 Dreamliner: una revolución de tecnología
En la mente de los diseñadores de Boeing cruzaban muchas cosas, entre ellas un sueño, para el fabricante, las aerolíneas y la aviación mundial. ¿Se logró el cometido? Si, con algunos tropiezos al principio (algo normal, pero que no debería de ocurrir), y de la planta de Boeing salió uno de los aviones comerciales de fuselaje ancho y altamente tecnológicos como lo es el Boeing 787 Dreamlier. Demos un breve vistazo a esta joya de la aviación actual.
La historia del Dreamliner empieza en 2003, cuando Boeing anunció el desarrollo de un avance sustancial de su popular línea de aviones comerciales, el 747 y el 767. El nuevo avión, denominado con el código interno 7E7, sería más eficiente en consumo de combustible y tendría un coste operativo un 20% inferior a los de sus competidores. Los motores serían más silenciosos y el avión sería más seguro y confortable para los pasajeros, gracias a una mayor presión atmosférica y temperatura en cabina.
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El desarrollo del Dreamliner comenzó en 2004, cuando Boeing lanzó el estudio conceptual del “avión súper eficiente” (SEA) en respuesta a las preocupaciones planteadas por las aerolíneas sobre el alto costo del combustible. SEA combinó varias tecnologías nuevas que se había estado desarrollando en Boeing y en otros lugares para crear un avión que sería un 20% más eficiente en combustible que los aviones existentes. El estudio del concepto produjo una familia que diferían en cada necesidad del operador, tamaño, tipos de motores; en total, se crearon tres versiones del modelo; 787-8/ 787-9/ 787-10.
Boeing trabajó en estrecha colaboración con numerosos socios para hacer realidad este ambicioso proyecto. La decisión de utilizar materiales compuestos para la construcción del Dreamliner supuso un cambio radical respecto a los métodos tradicionales de fabricación de aviones. En lugar de usar aleaciones metálicas pesadas para la estructura del fuselaje y las alas, el 787 usaría paneles compuestos de fibra de carbono reforzada con policarbonato infiltrado (CFRP). Estos paneles eran más ligeros que los metálicos, lo que contribuía a reducir el consumo de combustible, pero requerían nuevos procesos y tecnologías para su fabricación a escala industrial.
El 31 de agosto del 2006, luego de revisar sus opciones, Boeing anunció que lanzaría el programa 787 con General Electric (GEnx) y Rolls-Royce (Trent) como sus proveedores de motores.
Originalmente se esperaba que el primer vuelo del 787 Dreamliner tuviera lugar en 2007, pero los retrasos en la producción y certificación pusieron el programa un año de retraso al calendario (de hecho fueron dos). Finalmente el primer prototipo del 787 hizo su vuelo inaugural el 15 de diciembre de 2009.
El 26 de abril del 2007, All Nippon Airways se convirtió en el cliente de lanzamiento del 787 cuando realizó un pedido de 50 aviones con opción a compra por otros 30 modelos. Posteriormente ANA recibió su primera unidad en septiembre del 2011.
Sin embargo, poco después se empezaron a presentar problemas. En enero de 2013, un 787 tuvo que aterrizar de emergencia en Japón debido a un incendio en su sistema eléctrico; este fue solo el primer incidente de varios que pusieron en peligro la reputación del avión y provocaron una crisis de confianza entre los operadores y los pasajeros.
El problema provocó que todos los aviones fueron puestos en tierra durante varios meses. A pesar de todos estos contratiempos iniciales, el 787 sigue siendo una pieza clave del futuro de la industria aeronáutica.
El Boeing 787 Dreamliner es un avión de pasajeros twin-engine, wide-body, siendo el primer avión comercial del mundo construido principalmente con materiales compuestos en lugar de aluminio, lo que lo hace un 50% más ligero y 20% más eficiente en el consumo de combustible, que los aviones competidores de la época.
Boeing también incorporó nuevas tecnologías en el diseño del 787, como pantallas de información personal, el diseño alar, aviónica, cabina, entre otras más. Mientas que para los pasajeros, se prometía una comodidad sin igual, una mejor presurización y controles de luz ambiente para mejorar la experiencia de vuelo, ya sin contar las ventanillas que se opacan con un botón touch.
El Boeing 787 Dreamliner tiene una capacidad para hasta 300 pasajeros y puede volar hasta 9,700 millas sin realizar una parada para reabastecerse.
El Boeing 787 Dreamliner es una marca registrada de Boeing y se fabrica en Everett, Washington. Boeing ha entregado más de 1,400 Dreamliners a decenas de compañías de aviación en todo el mundo.
El 787-8 es el modelo original del Dreamliner y tiene una capacidad para un máximo de 250 pasajeros. El 787-9, que es un poco más grande que el modelo original, puede transportar como máximo 290 pasajeros. El 787-10, la versión más grande puede tener una configuración máxima de 323 asientos.
Algunas de las principales compañías aéreas que vuelan el Boeing 787 Dreamliner son:
- All Nippon Airways (ANA)
- Japan Airlines
- United Airlines
- British Airways
- Qatar Airways
- Etihad Airways
- Emirates
- Virgin Atlantic
- Air New Zealand
- Cathay Pacific
- Korean Air
- Lufthansa
- Aeroméxico
A pesar de sus problemas iniciales, el Boeing 787 Dreamliner se ha establecido como un ícono moderno de la aviación y ha sido adoptado por numerosas compañías aéreas en todo el mundo. Si planeas viajar en este extraordinario avión, debes saber que estarás volando en un ícono de la ingeniería aeroespacial contemporánea… ¡el sueño hecho realidad para muchos amantes de la aviación!
Felicitamos a un muy querido amigo de Transponder 1200; el Cap. Jorge Bretón, que durante su gran trayectoria en la aviación, ha logrado posicionarse en una de las mejores aerolíneas de México y al mando de los controles de un Boeing 787.